Una joven de 25 años denunció haber sido abusada en un local de la avenida Benjamín Aráoz

Una investigación por abuso sexual con acceso carnal derivó este jueves en el secuestro de múltiples elementos de interés, tras un allanamiento ordenado por la Justicia en un local comercial de la capital tucumana.

El procedimiento fue llevado adelante por efectivos de la Comisaría Primera, luego de que una joven de 25 años denunciara haber sido abusada sexualmente por un hombre de nacionalidad extranjera. Según su declaración, el hecho ocurrió el 30 de noviembre, mientras cumplía tareas laborales en ese local.

De acuerdo con la denuncia, la jefa de la víctima le habría dado a ingerir un té que le provocó un fuerte malestar físico. En ese estado de vulnerabilidad, el acusado habría aprovechado la situación para cometer el abuso.

A partir de la presentación realizada el 5 de diciembre, la Policía inició una serie de medidas investigativas, que incluyeron el relevamiento de cámaras de seguridad y la toma de testimonios. Con esos datos, se logró identificar al presunto agresor y se solicitó un allanamiento, que fue concretado en un inmueble situado en la primera cuadra de la avenida Benjamín Aráoz.

Durante el procedimiento se secuestraron tres teléfonos celulares, una tablet, hierbas vegetales que habrían sido utilizadas para inducir el sueño de la víctima, dispositivos de almacenamiento de las cámaras de seguridad y otros elementos relevantes.

Todo el material quedó a disposición de la Unidad Fiscal de Integridad Sexual de la II Nominación, que continúa con las investigaciones para esclarecer el caso.

El allanamiento fue dirigido por el comisario Néstor Campero, jefe de la Comisaría Primera, y supervisado por el comisario inspector Cristhian Peralta, jefe de Zona I de la Unidad Regional Capital.

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