El presidente sufrió una crisis nerviosa en la Quinta de Olivos, tras conocer el resultado de la votación sobre los pliegos de Ariel Lijo y García Mansilla. «Quería romper todo, tuvieron que contenerlo», reveló Eduardo Feinmann en su programa en Radio Mitre. El rechazo del Senado a los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla, los jueces que Javier Milei nombró por decreto en la Corte Suprema, causó estragos en la omnipresencia de poder que sentía el presidente. Furioso por las fallidas negociaciones, descargó su enojo contra Macri.
«Está asustado porque sabe que Karina lo va a jubilar, se terminó el kiosco del PRO en la Ciudad», se escuchó decir al presidente. Milei cree que hubo un acuerdo tácito entre el jefe del PRO y Cristina Kirchner para marcarle la cancha. «¿Dónde están todos los que decían que yo tenía un pacto con Cristina?».
Según trascendió, hubo fuertes gritos en la madrugada del 3 de abril. Milei le habría recriminado a Caputo por haberse confiado y esperado una ayuda del PRO que nunca llegó. «Eso de correrlos con aliarse al kirchnerismo cada vez funciona menos», es que en el círculo presidencial confiaban en la retórica «Anti K» para disciplinar a Macri.

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Mitre/Clarín